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LOÍZA – La alcaldesa de Loíza, Julia Nazario Fuentes, informó que tal como se esperaba, las marejadas causadas por las secuelas del huracán Lee en el Atlántico norte, causaron estragos en catorce (14) comunidades costeras de este municipio.
“Toda la zona costera ha sido afectada, pero particularmente desde la Playa Vacía Talega hasta Las Carreras y Tocones. Nuestro personal estuvo patrullando toda la noche y ahora en la mañana se está limpiando las zonas con desplazamiento de arena y poder volver a la normalidad. Pero sabemos que este tema de erosión costera es ya parte de la realidad costera. Se han asignado unos fondos por parte del gobernador Pierluisi, pero se ha fallado en la ejecución”, señaló la Alcaldesa.
Concretamente, Nazario Fuentes se refiere concretamente al anuncio hecho por La Fortaleza el 11 de abril pasado, donde Pierluisi declaró una emergencia por la erosión costera. Para financiar los trabajos relacionados con la orden ejecutiva, el gobernador asignó $5 millones de fondos ARPA y otros $100 millones del denominado ‘Programa de Mitigación en la Infraestructura’ para sufragar el costo de las medidas recomendadas.
En aquella ocasión, se informó que ya cerca de 99 kilómetros de costa y 58 kilómetros de playa han migrado tierra adentro, y que enfrentar el impacto de la erosión costera requiere acciones adicionales, ya que han aumentado los eventos de inundaciones, derrumbes y daños a vías públicas y propiedades privadas de nuestras costas. “Todo eso es cierto, pero el problema que vemos es que no hay ejecución rápida y efectiva. Ese anuncio fue en abril, y estamos a mediados de septiembre”, expuso la Alcaldesa.
En la orden de emergencia de abril, se le ordenó al Departamento de Recursos Naturales y Ambientales (DRNA) que, en coordinación con los municipios, la Junta de Planificación, la academia y otras entidades públicas y privadas, trabajaran en una multiplicidad de responsabilidades, como el deslinde de bienes de dominio público en la zona marítimo terrestre y la adquisición o expropiación de propiedades no habitadas o abandonadas en la zona costera.
Además, se proyectaba la demolición y remoción de estructuras en ruinas que sean estorbos públicos o que no cumplan función de protección o mitigación de riesgo, y la realimentación de playas con arena compatible. “Los Municipios estamos listos para cooperar y trabajar en conjunto. No se debe esperar más”, añadió Nazario Fuentes.
El Municipio de Loíza también ha generado iniciativas propias. El pasado 16 de marzo realizó la ‘Primera Cumbre de Erosión Costera’, como un reclamo de acción urgente para proteger a las comunidades expuestas a la destrucción de playas y costas, al tiempo que expertos científicos y representantes de agencias presentaron estudios ambientales y explicaciones sobre los procesos para obtención de fondos y poner en marcha proyectos.
La cumbre contó con la presencia, entre otras personalidades, de la alcaldesa Nazario Fuentes, la comisionada Jenniffer González, la secretaria del DRNA, Anaís Rodríguez Vega, así como la embajadora del Reino de Noruega en los Estados Unidos, Anniken Ramberg Krutnes, experta en temas ambientales y de manejo de costas. También hubo representantes de otras agencias estatales y federales, como FEMA, y de La Fortaleza, como el COR3.
